Doctrinas Fundamentales

Este libro examina el marco de la historia bíblica: la creación perfecta, una rebelión humana que trae maldición sobre la tierra, y un Rey que vuelve para redimir toda Su creación. Un libro que refresca nuestro entendimiento y nos lleva a evaluar nuestra cosmovisión a la luz de la Escritura y conformarla de una manera más fiel a ella. Es un libro que ha sido traducido a más de 8 idiomas, texto clave en el estudio bíblico y que ha transformado la manera de pensar y vivir de muchas personas.

¿Es posible conocer y definir la Verdad? ¿O solamente es posible sentirla y experimentarla? ¿Existe un fundamento último para la fe, o hemos de dar por buenos todos los enfoques e ideas? En este libro, el Dr. Martyn Lloyd-Jones afronta esta cuestión crucial de forma positiva, examinando la autoridad de Jesucristo, de las Escrituras y del Espíritu Santo.

“Este libro es un tratado inusual de soteriología (doctrina de la salvación). En 20 capítulos breves, escritos de forma sencilla pero nada superficial, Oskar Arocha nos presenta el multifacético diamante del evangelio, demostrando clara y contundentemente que la salvación es del Señor, que se encuentra solo en Jesús y que se obtiene únicamente por gracia, por medio de la fe

La función del Espíritu Santo en la vida cristiana es a menudo malentendida. Algunos creyentes se enfocan únicamente en los dones espirituales y otros evitan el tema por completo. No obstante, la verdad es que el Espíritu de Dios es indispensable para el corazón y la vida del creyente, y obra de buen grado en él. Por más de treinta años, el reconocido pastor y maestro John MacArthur ha impartido enseñanza bíblica práctica, a fin de ayudar a los cristianos a crecer en su camino de fe.

En El poder de Dios para tu vida, una obra nunca antes publicada, Tozer enseña a los lectores cómo permitir que el Espíritu Santo les transforme mediante el estudio de la Palabra de Dios. A. W. Tozer, uno de los más profundos pensadores y pastores de la iglesia del siglo XX, creía que la lectura de la Biblia no era suficiente: la Palabra tenía que hacerse realidad en la vida del cristiano. No basta con leer las Escrituras y tratar de obedecer sus mandatos; antes bien, para vivir en el poder de la Palabra es necesaria una transformación llevada a cabo por el Espíritu que hace que la Palabra se incorpore en la vida del creyente.